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Agosto 2020.- En las décadas que la industria automotriz busca ser más eficiente en sus emisiones, los motores turbo han sido una opción práctica para tener motorizaciones con baja cilindradas sin perder en la potencia del auto.
“Dentro de un motor normal, o aspirado como se le conoce, se produce una mezcla de combustible y aire que genera una explosión cuya energía sirve para mover el auto. Lo que hace el turbo es que ayuda a que ese aire tenga más presión y sea más rico en oxígeno lo que produce una explosión con más potencia”, explica Esteban Durán, gerente de post venta de SAIC Motor, fabricante de MG.
Entre los modelos de la marca que cuentan con este tipo de propulsor se encuentran el fastback MG 6 (1.5T); y los SUV MG RX5 y MG HS, ambos con opciones de 1.5T y 2.0T.
Los siguientes consejos ayudan a tener un buen cuidado de los motores turbo, alargando su vida y disminuyendo los posibles gastos de mantención a futuro:
Darse un minuto. El sistema de lubricación del motor funciona cuando este se pone en marcha. Una recomendación es dejar al menos un minuto el auto encendido (especialmente si el vehículo está muy frío) para que el motor agarre temperatura necesaria y así los aceites fluyan mejor.
Atento al acelerador. Si tiene la costumbre de pisar el acelerador al encender el motor, es mejor deshacerse de ella. Esta acción pone un mayor estrés al motor antes de que esté totalmente lubricado y en los vehículos actuales ya no es necesario hacerlo.
Partir relajado. Tranquilo con el pedal del acelerador, por al menos 15 minutos. Al momento de encender el auto y ponerse en movimiento, evita someter al motor a un estrés innecesario pisando de más el acelerador. Al igual que el consejo anterior, lo mejor es que el motor agarre temperatura antes de exigir más al vehículo.
Seguir el mantenimiento. Es muy importante seguir la pauta de mantenimiento para que los aceites que se mueven dentro del motor estén en buen estado. Lo mismo se aplica para los filtros de motor que lo mantienen libre de las impurezas que se generan por la combustión.
Ojo con las revoluciones. Si se exige mucho el motor desde revoluciones bajas (1.200 rpm, por ejemplo), las piezas internas del propulsor se ven sometidas a una carga extra.
Un momento al terminar. Al igual que el primer consejo, es recomendable dejar reposar el motor un minuto antes de sacar la llave de contacto. Es decir, dejar el vehículo detenido con el motor encendido, especialmente si el auto anduvo exigido. Por ejemplo, al andar en autopistas o carreteras, ya que esto ayuda a que los aceites del motor den una última vuelta, en vez de detenerse de golpe con el motor a alta temperatura.